22/09/2022

Cuida tu piel con este estupendo jabón de café

Cada día, más gente es consciente de la necesidad de reciclar y reutilizar todo lo posible, para reducir la cantidad de desechos y desperdicios, ayudando así al planeta. Entre muchas de estas maneras de apoyar el planeta, adquirir productos con menor cantidad de plásticos y envases es quizás uno de los más útiles.

Pero aparte de este tipo de acciones, tenemos otras que además de ayudar a reducir estos desperdicios, también nos generan un beneficio . Estoy hablando una vez más de reutilizar los posos de café.

Ya vimos en un artículo un montón de opciones en las que usar estos restos que quedan tras prepararnos una buena taza de café , pero hoy nos vamos a centrar en una más concreta, pues vamos a conseguir un estupendo jabón de café.

La idea es reutilizar el café usado, pero sí que es verdad que podrías utilizar un café molido para esto, y saldría un jabón aún mejor, ya que, al no haber sufrido ningún proceso previo, ninguna de sus propiedades antioxidantes o la cafeína se verá. degradada por el calor y el agua.

Pero repito que, ya que vamos a beber café, ¿Por qué no aprovechar los posos? También nos valen para este fin, y estaremos contribuyendo a reducir la cantidad de basura que se genera, que recordamos, que eran una cantidad abrumadora de café de manera anual.

¿Por qué jabón de café?

Un jabón de café es una buena manera de conseguir un producto natural para nuestra belleza y cuidado de la piel, pues posee una gran cantidad de propiedades beneficiosas para esta.

Por un lado, posee propiedades exfoliantes , que ayudan a eliminar la piel muestra de nuestro cuerpo, o suciedades como los puntos negros, pero, además, gracias a la cafeína, también posee propiedades anticelulíticas, actuando contra los depósitos de grasa acumulados bajo nuestra piel. .

Si esto te parece poco, otro de los beneficios que el café puede aportar a tu piel, es que puede reforzarla, aportando firmeza y combatiendo la flacidez, que junto con las propiedades exfoliantes que mencionamos antes, son un buen remedio contra las arrugas tempranas en nuestra cara.

El jabón de café, además, mejora la circulación sanguínea, optimizando el aporte de oxígeno y nutrientes en nuestra piel, ayudando a disminuir, por ejemplo, zonas inflamadas como el contorno de los ojos, reduciendo así problemas comunes como las ojeras. Otro ejemplo en lo que esto beneficia a nuestra piel, serían las clásicas rojeces o manchas que pueden aparecer en nuestra piel, producidas por diversos problemas, como podría ser el acné .

Otras propiedades que se le atribuyen al jabón de café, es la capacidad de acelerar la cicatrización de heridas, y de paso, mejorar la luminosidad de la piel, todo esto causado por las sustancias antisépticas y antiinflamatorias que aporta el café.

Además, este producto a base de café, estimula la producción de colágeno natural, garantizando una perfecta concentración de fibroblastos en la piel, con lo que esto se verá más sano y saludable.

Si por encima de esto, mezclamos el café con otros aceites o extractos naturales, obtendremos un estupendo remedio para combatir las estrías rojas, beneficiando el crecimiento de células nuevas.

Finalmente, la ventaja más deliciosa: el jabón de café tiene un olor muy agradable , que además de actuar como desodorante natural, dejará en tu piel ese estupendo aroma a café , que te acompañará todo el día.

 

Receta para el jabón de café

 

Si todas estas ventajas y propiedades te han convencido, es hora de ponerse manos a la obra y preparar este producto aromático natural a base de café.

Ingredientes y herramientas

Para preparar este jabón de café, vamos a utilizar:

• 300g de jabón de glicerina en barra
• ¼ de taza de posos de café, o café molido
• 1 toque de esencia de vainilla
• vaselina
• 1 taza de agua
• 1 cazo pequeño
• 1 recipiente de cristal o metal
• Moldes para el jabón de café

Elaboración

Una vez juntos todos los ingredientes y utensilios, es hora de comenzar a preparar este aromático jabón exfoliante a base de café totalmente natural:

• Comenzamos derritiendo la barra de jabón de glicerina al baño maría , para lo cual, lo colocaremos en el recipiente de metal o vidrio, y este lo pondremos sobre una olla con agua hirviendo. La idea es que el jabón reciba el calor del agua sin entrar en contacto con esta. Es recomendable hacer este paso a fuego medio , para asegurarnos de que el jabón no se quema en el proceso.
• Otra opción posible es retirar el jabón de glicerina en el microondas, tan solo introdúcelo a potencia máxima en intervalos de 30 segundos, sácalo, remuévelo, y si todavía no está derretido por completo, repetimos el proceso.
• Una vez que el jabón de glicerina esté derretido, lo apartamos de la fuente de calor, y le agregaremos la esencia de vainilla, así como los posos de café, y ayudándonos de una cuchara, removeremos la mezcla hasta que todos los ingredientes estén perfectamente integrados.
• Un pequeño truco es que, si quieres un jabón más consistente, puedes mezclar también un poco de leche en polvo en este momento, removiéndolo junto los otros ingredientes.
• Ahora, dejaremos que la mezcla repose un poco, y mientras tanto, aprovecharemos este tiempo para comenzar a untar los moldes con vaselina, y evitar así que el jabón de café se quede pegado en estos. Es importante que la vaselina quede bien repartida y de forma uniforme por todos los recovecos del molde, para evitar que luego nos queden pegotes de vaselina o bultos en nuestro jabón de café.
• Si quieres un jabón con aún más poder exfoliante, coloca al fondo de cada molde un poco más de café molido o posos de café, así quedará en la superficie de nuestro jabón y permitirá rascar con más fuerza la piel muerta.
• Ahora sí, rellenamos los moldes con la mezcla de jabón de glicerina, café y vainilla. Puedes rellenar los moldes hasta que creas conveniente, ya que no van a crecer más como sucedería con la repostería o con el hielo.
• Dejaremos reposar ahora el molde hasta que se enfríe un poco, y tras esto, lo introduciremos en la nevera , para acelerar el proceso y que, además, tenga mayor consistencia. Lo recomendable es dejarlos en la nevera al menos toda la noche , de este modo será más sencillo desmoldarlo y cortarlo con un cuchillo si usas un molde grande y quieres hacer porciones de jabón de café.
• Finalmente, debemos dejarlo reposar dos o tres días más para que cure , ya que, si no, corres el riesgo de que se deshaga demasiado rápido al contacto con el agua, así que, si quieres un jabón de café con buena consistencia y que dure. , no tengas prisa.

¿Cómo usar el jabón de café?

Tras dejar reposar nuestro jabón de café, es hora de usarlo. Para usar a modo de jabón exfoliante, tan solo debemos aplicar un poco de jabón de café en nuestra piel humedecida , y masajear la zona a exfoliar.

Gracias a llevar café en su mezcla, este jabón nos dejará restos del café molido o los posos en nuestra piel, que beneficiará aún más la exfoliación al masajear la zona con una esponja o un guante de crin.

De este modo, podremos activar todas las propiedades exfoliantes y anticelulíticas de nuestro estupendo y aromático jabón de café.

Al terminar el masaje, debemos aclarar la zona con abundante agua , y asegurarnos de que ningún resto de café o jabón se quede en nuestra piel, ya que, a la larga, estos restos podrían convertirse en suciedad, siendo perjudiciales para nuestra piel.

Como ves, es un proceso muy sencillo, lleno de ventajas y beneficios para nuestra piel, y que, además, nos dejará ese embriagador aroma a café que tanto nos gusta.

Recuerda que, si tu piel está seca, solo necesitas hacer este proceso una vez cada quince días, pero si tienes una piel mixta o grasa, sería recomendable hacer la exfoliación una o dos veces por semana.

Más usos del café en belleza y cuidado

Ya tenemos nuestro asombroso jabón de café, pero este grano molido tiene muchos más usos interesantes durante nuestra ducha.

Si no quieres andar con tanta receta, puedes hacer un uso directo de los posos de café durante la ducha, aplicándolos sobre la zona a exfoliar, y masajeándola un rato como si fuese una crema exfoliante. Solo debes recordar aclararlo bien una vez termines.

Otra opción interesante, es mezclar los mismos posos de café con tu gel de ducha habitual, o con aceite de oliva. De este modo crearemos una crema exfoliante natural a base de café, con todas las propiedades de las que ya hemos hablado.

Usos del café exfoliante en nuestro cuerpo

Por lo general, las zonas que más sufren debido a los roces constantes a lo largo del día, son las rodillas, codos y talones , por lo que acaban acumulando mayor cantidad de pieles muertas, y, por tanto, requieren una exfoliación mayor.

Para estos menesteres, podemos crear otra crema exfoliante casera, usando café, azúcar moreno y aceite de coco. Es mucho más sencillo de preparar que el jabón, tan solo debemos mezclar adecuadamente todos estos ingredientes hasta conseguir una pasta homogénea que sea sencilla de aplicar en nuestra piel.

Una vez lista, la aplicamos en la zona correspondiente y dejamos que actúe unos 5 minutos, más o menos, y terminamos el proceso aclarando la zona con abundante agua, a ser posible, fría.

Esta mezcla tiene una cosa muy interesante, y es que puede durar hasta 2 semanas si la guardamos en el frigorífico, por lo que no debes temer hacer más de la cuenta.

El café contra la celulitis

Otro remedio casero que funciona muy bien contra la celulitis, es esta mezcla de café molido o posos de café con aceite de germen de trigo . Una vez mezclado, solo debemos aplicarlo sobre la zona a tratar, lo envolvemos con papel film, y dejamos que repose durante 30 minutos. Pasado este tiempo, masajeamos la zona durante otros 5 minutos, y ya podemos aclarar la zona con agua.

Pero tenemos más remedios, este con productos que es difícil que no tengas en casa. Con el mismo café, clara de huevo y aceite de oliva , podemos conseguir una mezcla que también nos proporciona todos estos beneficios. Su aplicación es exactamente igual que la anterior.

Recuerda que masajear la zona después del tiempo de reposo es importante, ya que así conseguirás que todas las propiedades exfoliantes y anticelulíticas del café hagan efecto de manera eficaz.

Finalmente, puedes usar tu crema hidratante habitual para terminar de dejar la piel en la mejor forma posible.

El café contra las estrías

Para luchar contra estas molestas cicatrices, tenemos 3 posibles combinaciones de ingredientes que, junto al café, conseguirán una fórmula casera, natural y eficaz:

• Aloe vera : Juntando café molido con gel de aloe vera, y humedeciéndolo con unas gotas de agua, conseguiremos una mezcla perfecta para combatir las estrías. Extiéndela sobre la zona y déjala actuar unos 15 minutos. Aclaramos con agua fría, para que la circulación se active aún más, y listo. Esta mezcla tiene un doble beneficio, ya que el café dará todas las propiedades que hemos visto hasta ahora, y el aloe nutrirá de manera óptima nuestra piel, gracias a sus vitaminas A, B, C y E.
• Aceite de coco : Otra mezcla muy sencilla, tan solo necesitamos juntar el café con este aceite hasta obtener una mezcla que podamos untar en nuestra piel. Al igual que en el caso anterior, dejaremos que la mezcla actúe unos 15 minutos, y luego la aclararemos con agua fría. Si bien es cierto que esta mezcla nos proporciona menos ventajas que la anterior, el aroma que dejará en tu piel será mucho más agradable e intenso.
• Aceite de almendras : El aceite de este fruto seco tiene la ventaja de que ayuda a la hidratación de la piel, por lo que solo debemos mezclar dos cucharadas de este producto con media taza de café, para conseguir una loción hidratante realmente poderosa.

Usos del café exfoliante en nuestro rostro

La piel de nuestra cara está constantemente expuesta al sol y a otros factores externos, por lo que suele ser más sensible. Es por ello que debemos tener cuidado y buscar los productos más ideales para cuidarla adecuadamente.

Por eso, vamos a preparar unas mascarillas a base de café con otros ingredientes para que nuestra cara luzca más sana:

• Mascarilla de cacao en polvo : Crearemos una masa pastosa mezclando 6 cucharadas de leche entera o crema de leche, junto con 4 de café molido o posos de café, y además 6 de cacao en polvo. Sobre la piel limpia, aplicamos esta mascarilla y la dejamos actuar sobre 5 minutos, y acabamos aclarando con agua fría. Recuerda secarte la cara dando golpescitos y no frotando, ya que podría dañar tu piel, y recuerda también no aplicarla en el contorno de los ojos.
• Mascarilla de miel : Mezclamos una cucharada de miel, una de café molido y otra de azúcar. Antes de aplicarla, la humedecemos con un poco de agua, para que pueda arrastrar mejor las células muertas. Gracias a que tanto la miel como el café poseen propiedades antisépticas y antiinflamatorias, tu piel gozará de doble efecto.

Ya ves que el café da para mucho, ya sea bebiéndolo en deliciosas recetas, como el café vienés , el capuchino o el tradicional carajillo , o ayudándonos a cuidar nuestra piel.